El “BioHub” es un sistema que integra las bases de datos existentes de Interpol de reconocimiento facial y de huellas dactilares y palmares con una nueva tecnología de identificación con la que, además, los resultados llegan en poco tiempo.
En su esfuerzo por fortalecer la lucha global contra el crimen organizado y el terrorismo, Interpol dio acceso a las policías de sus 196 países miembros a un nuevo sistema biométrico de identificación, conocido como “BioHub”, informó la organización policial en Viena.
“Un prófugo puede cambiar su nombre y muchos aspectos de su apariencia para tratar de eludir la acción de la Justicia, pero es difícil, si no imposible, cambiar sus datos biométricos”, señaló en un comunicado el director de apoyo operativo y análisis de Interpol, Cyril Gout.
La organización policial celebra esta semana en Viena su Asamblea General con la lucha contra el crimen organizado y la digitalización de los cuerpos policiales como dos de sus prioridades.
El “BioHub” es un sistema que integra las bases de datos existentes de Interpol de reconocimiento facial y de huellas dactilares y palmares con una nueva tecnología de identificación con la que, además, los resultados llegan en poco tiempo.
Las comprobaciones anteriores con las bases de datos biométricas de Interpol estaban sujetas a procesos separados de varios pasos que incluían una revisión humana, lo que significa que se tardaba en informar de cualquier coincidencia.
“El ‘BioHub’ ayuda a los agentes a saber de inmediato si la persona que tienen delante supone un riesgo para la seguridad. Esto es especialmente importante en situaciones en las que los documentos de viaje no están disponibles o no son fiables”, explica Cyril Gout las ventajas de la nueva herramienta.
El “Biohub” fue presentado en una conferencia de Interpol celebrada en Singapur a principios de año, en octubre el sistema se puso en funcionamiento y ahora se ha extendido a todos los países miembros de la organización.
La nueva herramienta, que se espera que sea capaz de realizar hasta un millón de búsquedas diarias, supone un avance importante para las operaciones policiales en las fronteras, pero también puede emplearse dentro de los Estados, según Interpol.
Un ejemplo reciente de la efectividad del “BioHub” se dio en una operación en Sarajevo, la capital de Bosnia-Herzegovina, donde se identificó en un control a un traficante de personas reclamado por otro país europeo.
Según Interpol, el sospechoso, que se presentaba como un migrante más utilizando documentos falsos, fue identificado de forma rápida con este sistema y actualmente está a la espera de extradición.
La disponibilidad de esta herramienta a todos los países miembros es considerado por Interpol como un paso adelante en la lucha contra el crimen y el terrorismo.
Interpol asegura que la protección de datos está garantizada, ya que los valores biométricos empleados en las búsquedas no se agregan a las bases de datos, no son visibles para otros usuarios y las búsquedas sin coincidencias se eliminan del sistema.
Con información de EFE