La especialista en biología celular de la UNAM señaló que las proteínas que se ofrecen en los gimnasios, a través de malteadas o suplementos en polvo, pueden ocasionar una cirrosis metabólica, con una disminución del pH en la sangre y una mayor acidez de la orina.
Durante la conferencia magistral Las proteínas no son exclusivas para el gym, realizada en el marco de la 7ª Semana del Cerebro, la especialista en biología celular señaló que las proteínas que se ofrecen en los gimnasios, a través de malteadas o suplementos en polvo, pueden ocasionar una cirrosis metabólica, con una disminución del pH en la sangre y una mayor acidez de la orina.
Cuando se ingieren proteínas de más y se descuidan el resto de los nutrientes, apuntó, los riesgos de padecer osteoporosis y enfermedades renales aumentan de manera significativa.
Agregó que, al haber un incremento de ácido úrico, calcio, citrato y proteínas en la orina, también aumenta la probabilidad de enfrentar una osteoporosis, porque el calcio está saliendo de los huesos, se descalcifican; además, a la larga puede haber un daño renal, porque el riñón no está diseñado para que pasen a través de él todo este tipo de moléculas.
Consideró que hay una creencia general de que las proteínas por sí mismas ayudan a generar una mayor masa muscular en aquellas personas que se ejercitan justamente en los gimnasios, pero debe quedar claro: el tema de las proteínas va mucho más allá de únicamente utilizarlas como una fuente de energía para tratar de ganar musculatura.
“En los gimnasios es muy frecuente que a los atletas se les ofrezcan ese tipo de suplementos que vienen en malteadas, batidos, barras de cereal o frascos en los que viene un polvo que se disuelve en agua, leche o jugo, los cuales contienen proteínas que proviene del suero de la leche, la cafeína o pueden ser proteínas vegetales, como la soya, pero que muchas veces vienen acompañadas de altas cantidades de azúcares o grasas.”
Explicó que cuando las personas hacen ejercicio intenso se presentan desgastes o incluso desgarres, por lo que el cuerpo a través de una síntesis trata de cubrir la parte dañada, generando más músculo, para lo cual se requieren una serie de compuestos que son la base de las proteínas y los aminoácidos que viene contenidos en los suplementos que se están ingiriendo.
Así, resaltó, el daño en el músculo causado por el ejercicio, ocasiona que aquél trate de repararse a sí mismo generando más músculo y, en consecuencia, una mayor masa muscular.
Aguilar Maldonado aclaró que las proteínas son biomoléculas de suma importancia no sólo a nivel celular, sino también para el buen funcionamiento de todo el organismo, por lo que lo más relevante es que su consumo esté controlado mediante una dieta balanceada en la que además de proteínas se debe incluir carbohidratos, lípidos, minerales y vitaminas.
Insistió en que la forma más común de ingerir proteínas es por medio del consumo de las carnes rojas, el aguacate, la leche o algunos frutos secos.
“Muchas personas consideran las proteínas sólo como una fuente de energía para generar masa muscular, cuando en realidad son una parte necesaria en el funcionamiento de todo el cuerpo y cumplen funciones muy variadas y relevantes” concluyó.